jueves, 31 de enero de 2013

Hogar Dulce Hogar

Hogar Dulce Hogar,
 Birmingham 1, esquina con Zabaleta
Hace unos meses abrió en Gros una nueva cafetería/pastelería, una cafetería/pastelería ideal y estupendística cuyo único defecto son esas letras amarillas de fuera que recuerdan a un bar hortera de estación de autobuses de Burgos. Pero quitando eso todo lo demás me encanta.

Es entrar y te sientes como en casa, o mejor. Un lugar plagado de detalles para que estés lo más cómodo posible, tanto en el interior como en la terraza. El refugio ideal para estos meses de frío.

Las tortitas de plátano y chocolate
La decoración y el diseño es original y divertido. Tienen una pared de vegetación que enmarca la entrada a unos amplios baños, otra es una pizarra situada junto a un rincón dedicado a los niños (en la que por cierto está siempre escrita su contraseña de WIFI, qué majos ellos) y haciendo un poco de separación entre la puerta de entrada y las mesas hay una pared falsa de troncos de leña en la que puedes encontrar mantas por si quieres tomar el café en la terraza. Las mesas están acompañadas por sillas del mismo tipo de madera y sillas/sillones acolchados de diseño retro/modernetis (monísimas) y por si venís en grupo y tenéis la gran suerte de pillarlo libre, tenéis el sofá, situado estrategicamente al lado de la chimenea, de modo que podáis imaginar que estáis de vacaciones en una cabaña de Vermont con un chocolate con nubes en las manos.

Porque sí amigos, aquí sirven chocolate con nubes de algodón, y cafés que saben a magdalena o donut, y unas tortitas de plátano y chocolate que te harán plantearte si alguna vez has probado algo tan delicioso en tu vida. Toda una variedad de dulces y helados (e incluso hamburguesas al parecer) que le hacen a una desear volver a casa rodando.

Pero no creáis que el encanto hogareño está reñido con la tecnología, porque en muchas de las mesas podéis encontrar Ipads (candados por supuesto, que son majos, no tontos) para que os entretengáis, una pantalla sobre la que proyectan, a veces películas, a veces programas (a veces el fondo de escritorio de su portátil), acceso gratuito a internet (oh señor del WIFI te adoramos) e ¡incluso tienen un blog! Que podéis visitar aquí.

Por cierto, nos hemos fijado en que también venden productos de Mr.Wonderful, así que un punto positivo más.

Resumiendo:

ATENCIÓN AL CLIENTE(también atienden en terraza): Impecable. Normalmente en cuanto te sientas, una de las simpatiquísimas camareras se acerca con su uniforme/delantal de colorines y antes de que te des cuenta tienes tu pedido en la mesa. Siempre con una sonrisa en la cara.

BOLLERÍA: Todo lo que quieras y más, recordemos que es también pastelería, de modo que te encuentras desde galletas y magdalenas hasta brownies y tartas.

PRECIO DE UN CAFÉ CON LECHE: 1'30€. Muy buen precio comparado con otros sitios, pero os recomiendo que soltéis unos céntimos más y probéis los cafés especiales, no os arrepentiréis.


Mención especial al hueco que hay fuera para que dejes a tu mascota atada, con un cuenco de agua y un comic perruno para que se le haga más ameno.

Lovely

Aquí os dejo unas fotos más para que aprecieis el encanto del lugar, y el poco estilo fotográfico que tengo:


Atención al cartel que nos señala
cada zona (y a la espontánea de la derecha).

Troncos, mantas y viceversa.

Un jardín en el interior

Qué bonito, que hasta el contenedor
 de fuera hace juego y todo.

<3


martes, 29 de enero de 2013

Epoca Coffee


Todo mal pero a lo hispter.
O mejor no. El local ni siquiera es hipster. Se trata de un malogrado intento de crear un rinconcito acogedor, rollo vintage-época, pero en estos casos la acumulación ayuda; aquí, alguien ha querido mezclar un café estiloso de finales del XX con el encanto plastificado de la mejor moda vintage. Y no.

Pero vayamos a sus puntos fuertes; las chicas son monas y simpáticas, y te llevan el café (¿café… ejem…?) a la mesa.

Ahora con los malos.

n  Los precios son estúpidos. Para tomar un simple café con leche hemos tenido que pedir una especie de combo de café y donut. El donut estaba bueno, pero el café era una especie de infusión de ceniza de color grisáceo, sin espuma. Eso sí, el vasito de papel era precioso.

n  La música era amodorrante y, además, estaba mezclada con una extraña mezcla árabe hindú con fondillos de música de peli porno. Inexplicable.

n  Los ventanales que rodean al local (haciendo esquina junto a una facultad) eran intimidantes; un cristal tan a pie de calle hace que te pases la mitad de la visita con la vista de miles de transeúntes que te censuran con la mirada por estar tomando café en un bar de millonarios.

n  Los sillones, aunque cómodos, estaban sucios y tenían motitas; no vendría mal pasar un trapo entre cliente y cliente.

Pues sí, ha sido un show. La carta no era muy extensa, pero tampoco lo necesita; enseguida los precios suben por encima de los 4 euros y uno empieza a preguntarse por qué ha entrado. Estaba lleno de estudiantes Erasmus que habían ido a leer apuntes, charlar y esas cosas que hacen los Erasmus; lástima que no todos los destinatarios de la beca lleguen a conocer rincones de ensueño como Pao Fofo y tengan que conformarse con barezuchos que intentan dar una sensación de alegría plastificada envuelta en un malpegado celofán de gusto por lo antiguo. 



ATENCIÓN AL CLIENTE: Excelente. Además sonreían con los ojos. 
BOLLERÍA: Si puedes pagarla, está jugosa. 
PRECIO DE UN CAFÉ CON LECHE: 2,50, porque tienes que pedir un complemento por cojones. El resto de productos pasaban de ese precio y no los hemos querido mirar. 

lunes, 16 de enero de 2012

Tío Vivo

A precios de Feria
Calle del Clavel, 3  37002 Salamanca

Para celebrar y regocijarnos en la recién estrenada dirección de nuestro blog,  presento otra cafetería que se encuentra en las entresijadas calles de Salamanca. Y es que su localización no está muy a la vista; se trata de una calle pequeña y oscura, por lo que imaginad cómo es el local. No, espera. No te lo puedes ni imaginar.

Cuando cruzas las puertas de madera al estilo antiguo y te acostumbras a la oscuridad del local, te das cuenta de que  no sabes dónde mirar. Siguiendo una línea parecida a la de Café Erasmus y, en menor medida, María va con as outras, El Tio Vivo desborda con una decoración abundante con motivos como el cine, juguetes antiguos y los clásicos soldados de plomo de la guerra.

La barra está plagada de botellas protegidas por las patas de auténticos caballitos de Tio Vivo (un aplauso al oportunista que colocó el nombre), y por el local, en dos niveles, pequeñas mesas de café con velas, lo que sumado a la cristalera translúcida, la semi penumbra y una música agradable y amena hace el marco perfecto para una declaración de amor. Demos gracias a que aún no se han producido en nuestra presencia. Como las fotos dan mejor testimonio que mis descripciones, os dejo que os regodeéis en ellas mientras paso a explicar el plato fuerte de este bar.
Muy cerca de la escalera que lleva a los servicios, hay un enorme baúl, de los antiguos, lleno hasta los topes de ¡CACAHUETES! En efecto, al pedir el café de rigor y escoger una mesa, puedes llevarte un buen puñado de cacahuetes contigo y jugar a ver quién forma la montaña de cáscaras más rápido, mientras notas como la mezcla de café y fruto seco se apelmazan en tu estómago y te fijan a la silla por varias horas.

Sí, parece idílico eso de sentarse a comer indefinidamente, mirando los focos, las cadenas que van del techo al suelo, las velitas que se consumen… ¿y cuál es el gato encerrado? En efecto, los precios se disparan. 2,50 por un refresco, 1,60 por un café y flipa si quieres tomarte alguna bebida espirituosa.  Por no comentar la extrema lentitud del camarero (5,20 min. NO son tolerables para atenderte en barra con el bar vacío) y el hecho de que el royo cacahuete es muy bohemio, pero por dios, podrían limpiar cada X tiempo las montañitas de cáscaras del suelo, porque a veces sortearlas es indispensables para llegar hasta la silla.
También se incluyen niñas siniestras
que te miran desde las paredes.








Aún así, pasar por esa calle y no meterse en el bar es un pecado mortal para cualquier visitante de fin de semana de Salamanca; si vives aquí, puedes darte un garbeo una vez al mes y notar cómo tu barriga se hincha como si de pienso de gatos se tratase.



ATENCIÓN AL CLIENTE: Lentitud al estilo Casiopea
BOLLERÍA: No existe, pero ¿qué demonios importa?
¡¡CACAHUETES Y PIPAS GRATIS!! (Sí, hay pipas también)
PRECIO DE UN CAFÉ CON LECHE: 1'60€. Sí, bueno, los cacahuetes no son gratis y eso lo sabemos todos.








lunes, 9 de enero de 2012

Astoria7

Astoria7, Av. Sancho el Sabio 28
El hotel Astoria7 al que pertenece esta cafetería, está situado en el mismo emplazamiento que ocupaban los cines Astoria (muy queridos por una servidora, que siempre tendrá un rinconcito en su corazón para ellos), de modo que no es de extrañar que desde todas las paredes del lugar te observen fotografías y biografías de actores y directores famosos.


El sitio es amplio y con muchos asientos, así que tienes siempre una probabilidad bastante alta de encontrar una mesa libre. Además si te apetece que te dé el aire tienen terraza, que suelen mantener a veces aunque llueva gracias a unas megasombrillas-toldo.

A parte de las fotografías en las paredes se puede notar el espíritu cinéfilo a través de detalles como las pizarras en forma de fotograma o claqueta o los jarrones con negativos saliendo de ellos. El ambiente que crean es realmente acogedor para disfrutar de un café de un sabor muy rico.

Justo al lado está el restaurante del hotel, que según me ha contado una amiga está bastante bien y te ofrece unos menús originales llamados Cortometraje, Mediometraje y Largometraje dependiendo de la cantidad de platos que escojas y con una especie de "Elige tu propia aventura" en cada uno, ya que te permiten que seas tú el que decida de que forma o con que salsa quieres tomarlo, de modo que puedes tomar algo distinto cada vez que vas (o al menos eso es lo que me han dicho).

Esta es la puerta del de chicas, mucho más
puritano en comparación.
Por cierto, una mención especial a las puertas de los baños de la cafetería, decoradas con fotografías de actores. No sabemos quién las eligió, pero destaca la del baño de hombres gracias al bañador ultraceñido del actor. Si queréis averiguar a que me refiero ya sabéis a donde tenéis que ir.

ATENCIÓN AL CLIENTE: En general son rápidos una vez consigues que reparen en ti en la barra.

BOLLERÍA: Tienen unos bizcochos muy ricos y no son nada rácanos con las porciones, es más, normalmente cogemos una para dos. También tienen una amplia gama de pintxos.

PRECIO DE UN CAFÉ CON LECHE: 1'50€.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Museo Balenciaga

Museo Balenciaga, parque Aldamar 3, Getaria
El otro día me fui de excursión al Museo Balenciaga en Getaria con unos amigos y no pudimos hacer otra cosa que aprovechar la ocasión para incluir la cafetería del lugar a nuestro blog.


La foto es terrible, es que sólo teníamos el móvil...
 Después de un impresionante recorrido babeando ante los trajes de Balenciaga puedes disfrutar de un café en la planta baja.

El espacio es realmente amplio y minimalista,
iluminado con unas lámparas bajas en forma de esfera que dan una sensación acogedora y moderna.

La barra (eso verde que se ve al fondo) sigue con la línea minimalista del lugar. Osea que lo único que ves en ella son tres platos con pintxos y bollería. Las máquinas las deben de tener en la cocina.

Otra curiosidad de la barra es la camarera fantasma. No hay nadie, pero en cuanto te acercas aparece de la nada alguien para atenderte. Luego desaparece para conseguirte los cafés, pero la tienes de vuelta antes de que te des cuenta.

Añadir leyenda
Por cierto, me encantaron las tazas de café, eran grandes pero con estilo, muy en la línea del museo.

Se me ha olvidado comentar que aparte de las sillas que veis en la imagen también había, situados en varios puntos de la sala, unos sillones-huevo en verde pistacho que me habría llevado conmigo si hubiera podido (además eran comodísimos).

Fue una buena forma de rematar una gran tarde.

ATENCIÓN AL CLIENTE: Son rápidos, aunque el hecho de la camarera-fantasma aturde un poco.

BOLLERÍA: Tienen bocadillitos y bollería en la barra, aunque no había demasiada variedad, tal vez porque fuimos ya tarde.

PRECIO DE UN CAFÉ CON LECHE: 1'40€