Todo mal pero a lo hispter.
O mejor no. El local ni siquiera es hipster. Se trata de un
malogrado intento de crear un rinconcito acogedor, rollo vintage-época, pero en
estos casos la acumulación ayuda; aquí, alguien ha querido mezclar un café
estiloso de finales del XX con el encanto plastificado de la mejor moda
vintage. Y no.
Pero vayamos a sus puntos fuertes; las chicas son monas y
simpáticas, y te llevan el café (¿café… ejem…?) a la mesa.
Ahora con los malos.
n
Los precios son estúpidos. Para tomar un simple
café con leche hemos tenido que pedir una especie de combo de café y donut. El
donut estaba bueno, pero el café era una especie de infusión de ceniza de color
grisáceo, sin espuma. Eso sí, el vasito de papel era precioso.
n
La música era amodorrante y, además, estaba
mezclada con una extraña mezcla árabe hindú con fondillos de música de peli
porno. Inexplicable.
n
Los ventanales que rodean al local (haciendo
esquina junto a una facultad) eran intimidantes; un cristal tan a pie de calle
hace que te pases la mitad de la visita con la vista de miles de transeúntes
que te censuran con la mirada por estar tomando café en un bar de millonarios.
n
Los sillones, aunque cómodos, estaban sucios y
tenían motitas; no vendría mal pasar un trapo entre cliente y cliente.
Pues sí, ha sido un show. La carta no era muy extensa, pero
tampoco lo necesita; enseguida los precios suben por encima de los 4 euros y
uno empieza a preguntarse por qué ha entrado. Estaba lleno de estudiantes Erasmus
que habían ido a leer apuntes, charlar y esas cosas que hacen los Erasmus;
lástima que no todos los destinatarios de la beca lleguen a conocer rincones de
ensueño como Pao Fofo y tengan que conformarse con barezuchos que intentan dar
una sensación de alegría plastificada envuelta en un malpegado celofán de gusto
por lo antiguo.
ATENCIÓN AL CLIENTE: Excelente. Además sonreían con los ojos.
BOLLERÍA: Si puedes pagarla, está jugosa.
PRECIO DE UN CAFÉ CON LECHE: 2,50, porque tienes que pedir un complemento por cojones. El resto de productos pasaban de ese precio y no los hemos querido mirar.
Oh dios mio...HEMOS VUELTO!! Queremos fotos del interior, aunque no te haremos arruinarte por volver, ve y simula que tienes que usar el servicio :)
ResponderEliminarTiembla Granada.
ResponderEliminarNo sé si habrás estado en el mismo época coffee que yo de derecho, pero allí un café con leche (le llaman coffee latte) no cuesta 2,50€ vale menos, y lo puedes pedir solo, esta en el cartel de la izquierda...
ResponderEliminarCreo que la persona que escribe esta entrada no ha estado en ningún Starbucks. Sinceramente es una imitación bien lograda. Bien lograda y mucho más barata.
ResponderEliminarSin lugar a dudas un sitio recomendable. Aparte tienen leche sin lactosa y de soja. Un detalle para quien lo necesite.
A la persona que escribe si da una vuelta mínima por fuera de Granada, si va a un Starbucks comprenderá que ésta sí es buena opción.
Yo estuve muy cómodo cuando fui. La musica estaba a un volumen bajo que te permite charlar ( es una cafeteria, no una discoteca ) y los camareros son amables y simpaticos. No es cara pero si un poco más que la tipica cafeteria, pero la calidad de los productos y el ambiente hay que pagarlos.
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