jueves, 7 de abril de 2011

Confeitaria Baptista

Cuéntame. O mejor no.


R. Formosa, 285
4000-000 Porto Porto
Cuando vas por Rua Formosa un martes por la tarde, con la calle atestada de gente que viene y va, nada apetece más que tomar un buen café al margen de todo lo que pasa alrededor.   Es entonces cuando ves esta cafetería, a todas luces de nivel, tanto por su céntrica localización como por la buena presencia del local.

Mais...

En el escaparate se muestra la bollería, y ojo al dato, con cartelitos que anuncian el precio. Éste simple detalle la desmarca del resto de locales, en los cuales el hecho de preguntar te hace chasquear la lengua. Una vez dentro, el local es amplio, con la barra a la derecha; una decoración de hace unos 20 años, que al fin y al cabo tampoco sorprende demasiado estando en la ciudad que estamos, y unas largas, largas escaleras que has de subir si lo que quieres es mear.

A la hora de ir a sentarnos todo pintaba bien, hasta que reparamos en un mínimo detalle, y es que apenas cabíamos en la mesa. Y quiero decir con esto que las piernas nos chocaban con las sillas de los lados, apenas podías dejar colgada la mochila sin que se montara en la otra mesa, sin contar con los tres señores al borde de la muerte que se sentaron (incomprensiblemente, dado que el local no estaba muy lleno) a nuestro lado.
La presión del espacio y los cuchicheos y sonidos que salían de las bocas de aquellos señores habría sido soportable de no ser por el terrible incidente del lunch que pedí para relajar el paladar. Alguna mente perversa había colocado aros de cebolla camuflados entre la carne y el queso. Tardé medio lunch en darme cuenta, cuando mi boca ya apestaba a cebolla; gracias a Ana por cambiarme su croasán (aceptable) para no acabar vomitando en medio del local.

En cuanto a los camareros, encajan con la decoración del local; gente que hace 20 años era joven y alegre a la vista, y que ahora…. Son muy buenas personas, porque no les faltó una sonrisa para cobrar el 1,30 del lunch encebollado y un vaso de leche que según nuestra corresponsal aquella tarde es  de lo más barato que ha encontrado en Porto; textualmente,

‘’Dios, al menos no me han cobrado el vaso de leche como si fuera oro’’

Es de mencionar la pequeña y retirada parte del fondo con pared de espejo; hay que pensar que, quitando unas cuantas mesas y dejando la cebolla para otro día, Baptista es una buena opción para sentarse y ver pasar la gente al otro lado del cristal. Pero si vas con más de tres personas, dirígete a cualquier otra cafetería en la que no tengas que abrirte paso entre montones y montones de sillas apelmazadas.

¡¡Ahá!!

- CAFÉ: Delta, de muy buena calidad; aunque sólo probé un sorbito.

-BOLLERÍA: Variedad, sí, pero a qué precios… y con ingredientes extraños a tutiplén.

-SERVICIO AL CLIENTE: Los tres señores mayores te dedican una sonrisa al clavarte el precio, y no destacan por su lentitud; un 7.  


-PRECIO DE UNA MEIA DE LEITE: 0,85 €… en relación al lugar, aceptable. 

3 comentarios:

  1. Eh! Estos amables señores nos perdonaron 20 céntimos con una sonrisa la primera vez que fuimos y jamás nos los han pedido, que conste.

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  2. Al final se le ha olvidado comentar eso...

    No me he podido reír más al leer mi comentario textual...jajaj

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  3. 20?? Y qué cuernos es eso comparado con el rato que pasamos enredados en patas de mesas y sillas?

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